Buell Super Touring 1190
La novedad más cercana a la producción real es la Super Touring... o así la llaman ellos. Realmente lo que vemos es la anterior naked 1190 SX, que era una versión desnuda de su deportiva 1190 RX, equipada con algunos componentes viajeros. Así vemos un doble faro frontal, metido en una especie de caja metálica, y encima de ello una alta, ancha y plana pantalla transparente. Detrás se aprecia un asiento de dos plazas bastante más apto para dos personas que en las anteriores, casi monoplazas, además de un ancho y alto manillar que, unido a unas estriberas reposicionadas, darán al conductor una postura bastante más cómoda. Al conjunto se añaden dos maletas de aluminio y... ¡listo! ¡moto touring creada! Prometen los 185 cv a 10.600 rpm que otorga el motor V2 a 72º de 1.190 cc (106 x 67'5 mm) y 138 Nm a 8.200 rpm de la SX y un peso bastante contenido que rondará los 200 kg sin gasolina. Las llantas siguen siendo las mismas de 17", equipadas con neumáticos 100% asfalto... al menos no han querido darle un inexistente toque trail.
En Buell, una marca que renace por enésima vez de aquella interesante iniciativa de Erik Buell, consideran que poniendo a una naked (creada en 2014, recuerdo) una pantalla enorme y un asiento decente, más dos maletones de trail, con eso tienen una sport-touring. Lo ven así, aceptemoslo. Pero creo que queda claro que con ese pantallón anclado directo al manillar, mas la corta distancia entre ejes que no parece hayan aumentado, y las maletas como guinda, circular un día de viento con ella no debe de ser agradable. Ni tampoco tener tanta vela cuando le arrees a los 185 cv. Además, como a la hora de la verdad sigue siendo la misma moto que ya vimos en 2009 como 1125 CR, vuelven a repetir el chasis doble viga con el combustible en su interior (17 litros), las radicales medidas geométricas, o el único freno frontal perimetral de 386 mmø mordido por pinza de ocho pistones. Lo mismo. Supongo que habrán mejoras, por supuesto, sobre todo en electrónica, pero ahí sigue lo demás.
Buell Baja DR 1190
Supongo que para demostrar que pueden hacer algo distinto, también pretenden comercializar la moto más ilógica que he visto en años: una réplica de su -competitiva, hay que reconocerlo- moto de hill-climbing (subida imposible). Equipa, por supuesto, su motor V2 1190 (que es una evolución propia de aquel Rotax Helicon 1125 de principios de siglo). A él se atornilla un chasis inédito, hecho en tubo de acero, con un basculante largo de narices que incluye varios anclajes con los que poner la rueda trasera más lejos todavía (declaran una distancia entre ejes variable entre 1.670 y 1.780 mm), que personalmente considero que tiene un aspecto totalmente endeble, más con la potencia, 175 cv esta vez, que prometen que rendirá el bicho. Para seguir con las extrañezas el escape discurre por debajo del motor y ambos carecen de protección. Lo más normal en una moto de montaña, por supuesto...
Aquí la Buell HCR (Hill Climbing Racing) 1190 en la que se basa la Baja DR |
Mi opinión personal: ¿Así pretenden abrir mercado?
A ver, lo veo desde mucha distancia y sin conocimientos, lo reconozco. A la hora de la verdad jamás he dejado de decir claro que soy un simple aficionado a las motos que tiene un ordenador con el que escribir sus impresiones. Además el concepto de motocicleta que tienen los estadounidenses es muy distinto al europeo la mayoría de las veces.
Pero me pregunto: ¿creen de verdad que, esta vez sí, la moto que les ha llevado a la quiebra varias veces en trece años, ahora les va a llevar al éxito?. Por mí que ojalá sea así, cuantas más marcas mejor. Pero no tengo claro que el camino correcto sea repetir una y otra vez con lo mismo. Que sí, que tienen planos, moldes y utillaje, por lo que no tienen que invertir en proyectos desde cero. Pero es que esta fórmula (motor, chasis, medidas, freno) ya la usaban en ¡2009! y solo les llevó a una quiebra tras otra. Además, de acuerdo que quieran explorar nuevos mercados, pero yo considero que debería ser con lógica, o por lo menos con la lógica de un aficionado europeo. Y yo, lo siento, no se la veo a una naked de 185 cv, y menos con posición trail, un soporte de faros que parece hecho por un aficionado con plancha y una sierra de metal, más el gusto justo que luce un pantallón más propio de una custom, a lo que se le une las maletas metálicas que, entiendo, no podían ser de plástico y, con ello, estar algo más conjuntado con el concepto. Como si al cuñao que no entiende de motos le hubieran dejado una 1190 SX y un catálogo de Givi y le hubieran dicho 'ale, conviértela en una moto para viajar'.
Y luego está la Baja DR, nombre y letras que a muchos nos retrotraerán a aquellas interesantes Suzuki trail de los ochenta. Lo siento, para mí un absoluto sinsentido. Me recuerda a esos vídeos que hay circulando, gente que coge de un desguace una RR de tropecientos cavallos y la transforman a montaña para acelerar como si les persiguiera el diablo, sudar, divertirse... y de nuevo al cobertizo a soldarle más tonterías. Porque ¿qué montaña vas a hacer con 175 cv, una distancia entre ejes enorme, un basculante enclenque y un escape a un palmo del suelo? Que sí, que si te vas a las dunas de arena de California seguro que te diviertes... pero ¿dónde más hay desiertos donde jugar con eso?. No sé... no se puede negar que será un producto 100% para el mercado norteamericano, australiano... y para algún adinerado que gusta de tener un Hummer de combate.
O eso creo yo. Ojalá que les salga bien y vendan muchas. Repito que cuantas más marcas, cuantos más modelos de motocicletas, mucho mejor, más posibilidades de que uno acierte con nuestro sueño. Suerte de nuevo, Buell.
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