a la caja de filtro de aire para que la arena no dé problemas.
En la parte ciclo de serie tenemos material "que roza lo ilegal", pues la Himalayan lleva llanta de 21" delantera y suspensión trasera monoshock con bieletas, así que no indican cambios, supongo que apenas una puesta a punto a base de aceites y muelles. Los neumáticos son Pirelli MT-21 Rallycross, que yo monté para uso mixto en mi añorada Honda XR 600 con un resultado muy bueno. Los frenos son de serie (supongo que repasados de pastillas y líquidos "europeos") y, para que el ABS no interfiera, han instalado un interruptor para conectarlo o no a placer.
Como del motor de carrera larga y baja cilindrada no se puede esperar mucho, han buscado aligerar la moto todo lo posible. Así que fuera todo el frontal araña-faro-pantalla-cuadro, además del guardabarros delantero. Todo ha sido sustituido por material más liviano y robusto para campo... con un innegable toque ochentero: guardabarros elevado vintage; una bella (para los cincuentones) máscara de faro Elba de Acerbis; una compacta y cilíndrica unidad Koso que marca velocidad, rpm y alguna cosa más; un manillar de aluminio Tomaselli, unos protectores de manetas y una toma usb para cargar aparatos de orientación.
En la parte trasera también han habido cambios. El asiento pasa a ser monoplaza, la zona del ahora desaparecido pasajero recibe una parrilla desmontable que sujetará una bolsa pequeña. De la araña delantera original se ha utilizado uno de los laterales que sirven de protección del depósito para hacer un soporte situado en el lado izquierdo. El portamatrículas original y los intermitentes han sido sustituidos por unidades led de enduro, más compactas y ligeras. Para rematarlo todo el conjunto se ha decorado de una forma sencilla y elegante, con un aroma al Paris-Dakar original de los ochenta verdaderamente logrado.
La verdad es que los que tienen una Royal Enfield Himalayan 410, si la compraron sabiendo qué es y hasta dónde llega, están muy contentos con ella. Pero yo siempre he pensado que estéticamente le faltaba un algo. Sí, en muchas zonas tiene aspecto clásico, pero el conjunto, para mí, no está logrado... y se podría con facilidad. Ya os enseñé una preparación venida de la misma India, pero es que esta catalana de adopción de Fuel Motorcycles me ha enamorado. Quizás, sólo quizás, un recorte de la zona trasera para poner un guardabarros vintage y un faro redondo con portanúmeros ovalado delante (¿qué tal imitando a las Nonfango de las Montesa Enduro?) la acercaría a mi ideal: una réplica de aquellas todo terreno de los setenta, sin más pretensiones de divertir de una forma tranquila a sus propietarios. Ojalá lleguen fotos a Royal Enfield de esta bella Royal Rally 400 de Fuel Motorcycles... y se lo planteen.
Fuente: Fuel Motorcycles
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