La llegada de Álvaro Bautista, piloto que ha sido piloto oficial Suzuki, piloto desarrollador de Nissin y Showa con Honda, piloto oficial Aprilia y piloto satélite Ducati, ha sido como una especie de huracán. Y con él la nueva, novísima Ducati Panigale V4 R, la primera Ducati "normal" con motor de cuatro cilindros (ya existió aquella Desmoseidici RR de edición muy limitada). Una moto que sí, que no se parece ni en el motor, ni en el chasis, ni en la aerodinámica a la MotoGP, pero que realmente deriva, en mucho, de ella... sólo que la marca italiana lo ha ocultado muy bien.
SBK, las "carreras-cliente matriculables" y las "deportivas matriculadas preparadas"
En W-SBK siempre han habido dos tipos de motos: las "normales", las motos de grandes series (casi todas japonesas), motos muchas veces con una vertiente más "de calle" que verdaderas bestias de circuito. Y luego ha habido un pequeño plantel de motocicletas muy exclusivas, verdaderas pura sangre de circuito apenas aderezadas con los componentes mínimos para poder ser matriculadas. La Honda VFR 750 R, alias RC30, llevaba un chasis monolítico con frenos, suspensiones y llantas normales... porque era lo que la mayoría primero quitaba para competir. El motor apenas tenía 100cv, pero los cárteres podían soportar sin miedo casi el 50% más... ahora, cuanto querías preparar el motor iba a tu gusto (o bolsillo). Yamaha también sacó una maravillosa FZR 750 RR "OW01". Años después Honda volvía a la carga primero con la RVF 750 R, la RC45. Y como no lograban vencer a las Ducati biclindricas de 1000cc, otras motos de ensueño,
crearon sus propias V2, las VTR 1000 R, unos pepinos que solo iban bien... en circuito.
Desde entonces... nada. Sí, motos buenas, muy buenas, sin duda. Pero todo lo que ha llegado de Japón han sido grandes productos de altas tiradas. Incluso compartían piezas con sus hermanas pequeñas de 600cc. Sólo los italianos, Ducati y Aprilia, han insistido en modelos especiales, motos muy de carreras... pero de calle. Vamos, motos matriculables llevadas al límite más que motos de carreras con matrícula. Maravillosas sin duda, pero muy alejadas de las MotoGP.
Las SBK entran en MotoGP... y pierden, claro
ART: una Aprilia RSV4 llevada al máximo para MotoGP |
El resultado... dos segundos por vuelta más lentos que las MotoGP punteras, uno largo que las MotoGP de alquiler con sus motores capados. Las SBK son magníficas, pero siguen siendo motos de calle con mucha preparación. Y aquellas CRT fueron "el culmen" del equipamiento. Y no lograron nada de nada.
Ducati Panigale V4 1000 R: una MotoGP para un piloto de MotoGP
Ahora volvamos a 2019. 23 y 24 de Febrero. Circuito de Phillip Island, en Australia, una pista conocida tanto por pilotos de WSBK como MotoGP. De MotoGP llega Álvaro Bautista, sorprendente apuesta de Ducati para su equipo oficial, en el año que debutan con su primer motor de cuatro cilindros de calle homologable para SBK. La moto engaña, pues "calca" lo visto en la Panigale 1199 bicilíndrica: chasis semimonocasco con el motor haciendo funciones resistentes, basculante monobrazo, carenado "muy de calle" con tomas de aire bordeando los faros y cúpula bajita, colín casi inexistente... Vamos, que la Panigale V4 1000 R ni de lejos ni de cerca se parece a la Ducati de MotoGP, con su chasis doble viga, inmenso basculante de dos brazos y elaborada aerodinámica. Ni siquiera ser la primera moto de carreras matriculable con dos discretos spoliers le acercaba a la compleja colección de alas de sus primas lejanas de MotoGP.
Pero estaba claro que todo eso es mentira, maquillaje... la Panigale V4 1000 R es una moto derivada de MotoGP. El motor es el único en la parrilla de W-SBK con pistones al límite de lo permitido: 81mm de diámetro (81x48'4mm). Es el único con sistema de cierre de válvulas sin muelles (permite árboles de levas más agresivos y soporta mejor altos regímenes de revoluciones). El único con cigüeñal contrarrotante. El único con orden de encendido muy cerrado. Y encima se les permite por reglamento un régimen máximo a principio de campeonato de 16.350 rpm... mientras que la siguiente "más alta", la MV Agusta, se le permite 14.950 rpm.... ¡1.400 rpm más en la Ducati!. Y peor, la reina de SBK, la Kawasaki ZX-10, sólo tiene permitidas 14.600 rpm, por lo que tienen una diferencia de 1750 rpm... un mundo. Pero incluso más que todo eso, la moto de fábrica lleva una electrónica derivada de la de MotoGP... pero del MotoGP de hace tres temporadas, cuando no había límite ni en hardware ni en software.
En la parte ciclo tenemos lo mismo. Sí, el chasis es muy distinto, por no hablar del basculante, pero como bien decía nuestro llorado Antonio Cobas lo realmente importante no es ni la forma ni el material del chasis, lo importante son las geometrías y el reparto de pesos. Y en eso seguro que se ha vuelto a imitar a la D16 de MotoGP. Además unámosle el mejor material de Ölhins, similar en ambas categorías.
Las MotoGP entran en W-SBK... y ganan, claro
Ducati ha apostado bien este año, con un Chaz Davies con conocimientos de los Pirelli y compenetración en el equipo Ducati SBK fábrica. Y han añadido, por si la Panigale V4 R era demasiado MotoGP para él, a su lado del box a un piloto curtido en pelear con motos muy necesitadas de evolución en la categoría máxima del motociclismo, un piloto con "linea directa" con Gigi Dall'Igna, el gurú técnico de competición de la marca. Bautista hace nada declaraba que la Panigale V4 le recordaba una MotoGP de hace unos años, pero con Pirelli y unos frenos menos poderosos. Y ha sido Bautista, el mismo que tuvo que correr con las primeras Aprilia RS-GP, que eran la evolución final de las ART que os comenté al principio, aquellas motos de SBK hipervitaminadas, el que ha hecho debutar la "Ducati MotoGP réplica". Un piloto de MotoGP, con grandes conocimientos de la categoría, con una moto que hace cuatro años hubiera sido buena en la categoría máxima.
El resultado ya lo sabes amigo: victoria en la carrera del sábado (22 vueltas) liderando desde la primera vuelta y con quince segundos de ventaja ante el hasta ahora intocable Jonathan Rea. Segunda carrera, ya en domingo y a diez vueltas (Superpole Race), victoria de Bautista con 1'17 segundos de ventaja otra vez contra Rea. Y la tercera carrera del fin de semana, de nuevo a 22 vueltas, otro baño desde la primera vuelta a Rea por parte de Bautista, esta vez doce segundos (llegó a llevar 18).
MotoGP ha llegado a SBK. Por supuesto Bautista NO va a ganar todas las carreras, habrá circuitos que no conozca, habrá pistas que no ruede bien, habrán caídas, habrá falta de puesta a punto... y también, sin duda, habrán rivales duros, muy duros que le apretarán las tuercas. Pero mientras Dorna no baje, y de forma sustancial, el número de rpm de las Panigale V4 R, mientras la diferencia entre motos sea tan amplia... y mientras los demás pilotos no se pongan a la altura de Bautista en conocimientos sobre electrónica y puesta a punto, MotoGP seguirá ganando a SBK. Porque es ley de vida.
MiguelXR33
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